jueves, 10 de mayo de 2007

El descontrol del Gobierno ante todo tipo de manifestaciones en el país.





En Calama las Fuerzas Especiales, previo permiso de Gobernación, ha reprimido brutalmente en las manifestaciones contra los malos olores, donde además se golpeó al equipo de este periódico, y en las movilizaciones de los trabajadores contratistas. En Arauco el descontrol del Gobierno, personalizado en las fuerzas policiales, terminó asesinando a un trabajador contratistas del sector forestal, la idea es amedrentar todo tipo de alzamiento para no dar la sensación de que el Gobierno de Bachelet es ineficiente en todo orden de cosas.

Los pobladores del sector poniente de Calama, que manifestaban contra los malos olores emitidos de la Planta de Tratamientos de Aguas servidas, contra la ineptitud de las autoridades calameñas para dar una solución concreta al respecto, los trabajadores contratistas que prestan sus servicios a Codelco Norte, que se movilizaron por mayor dignidad y para reclamarle a la presidente la falta a sus compromisos, también los estudiantes secundarios y universitarios cada vez que salen a las calles a solicitar mejoras en la educación y en el acceso a ellas, los mapuches, los trabajadores que en Santiago asistieron al masivo acto de la CUT por el dí del Trabajador.
Todos ellos han sido victimas del amedrentamiento policial, del abus de fuerza, de la represión con que Carabineros de Chile, principalmente las Fuerzas Especiales (enviados directamente por el gobierno -intendencias y gobernaciones en provincias-) que utilizan para callar las voces de reclamo, para sembrar miedos en los manifestantes, para no dar la imagen de que el Gobierno de Bachelet, sus asesores, sus ministros, intendentes y gobernares, han sido ineficientes al momento de dar respuestas a la población, al momento de implementar políticas sociales reales y de lograr satisafcer las necesidades de la gente.
Es más, se protege la propiedad privada y sus recursos al momento que alguna movilización se hace masiva, como el resguardo a la Planta de Tratamientos en Calama por parte de quienes deben cuidar de la ciudadanía o de la empresa forestal que estaba en conflicto con los trabajadores contratistas de Arauco y donde un trabajador fue asesinado a manos de Crabineros, en concecuencia de el Estado.
Ahora las organizaciones sociales, sindicales y de izquierda han anunciado que estarán alerta ante cualquier señal de violencia, para repudiarla, denunciarla y combatirla, en esa parada debemos estar todos los ciudadanos.

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